Somos seres narracionales, escuchadores de historias que deben ser contadas. Hemos aprendido que es el miedo a perder lo que nos pierde, que nuestra mente está condicionada para encontrar justificación a nuestras primeras impresiones, tanto si son fundadas como si no, y que prefiere la infelicidad a la incertidumbre. Si como creen algunos, la vida destruye nuestros sueños cuando están a punto de destruirnos; si “relatar es relatarse”, las 30 píldoras motivacionales son una invitación a reescribir nuestra relato, a repensar nuestra forma de mirar el mundo. Un mundo que, para Albert Einstein, “estaba hecho de historias, no de átomos”. No esperemos a tenerlo todo para disfrutar de la vida, ya tenemos la vida para disfrutarlo todo.

Fueron grabadas con la idea de llevar algo práctico, algo útil, algo con alma, a quien lo necesitara en una época de confinamiento en casa y de exceso de información no siempre necesaria. En ese tiempo, cuando llegaban mensajes del tipo “Te dejo aquí un abrazo por si te hace falta entre tanta información” se agradecían. Fueron editadas y publicadas en una red social para profesionales como “Confinavideos” entre el 21 de marzo y el 19 de abril de 2020. Cada Píldora tenía una duración máxima de 30 segundos. Algunas personas y asociaciones también las recibieron por WhatsApp.

• Cuando crees que sabes todas las respuestas, la vida viene y te cambia todas las preguntas.
• Lo que crees que te estás perdiendo, te está salvando de perderte.
• Sal del modo “azar” y ponte en modo “hacer”.
• Se nos ha dado el poder de cambiar, pero no el derecho a cambiar a nadie.
• Soltar no es decir “adiós”, es decir “gracias”.
• Si dudas de tu poder darás poder a tus dudas.
• Tu tarea no es intentar cambiar a las personas tóxicas. Tu tarea en cambiar en ti aquello que te ha conectado con ellas.